Dan Perjovschi

Obras
Biografía
Sibiu, Rumanía - (1961)
 
            Dan Perjovschi es un artista y activista político rumano que comenzó a destacarse en la escena internacional por sus dibujos animados e ilustraciones cómicas que brotaban en diversas superficies: paredes, ventanas, techos, puertas y pisos de todo el mundo. Su formación tuvo lugar durante la dictadura de Nicolae Ceaușescu, en la redacción de la revista 22, una publicación líder de la resistencia rumana, fundada por el Grupo de Diálogo Social, del cual formaba parte. Aunque estudió pintura durante doce años, para su sátira prefiere usar marcadores o tizas y expresarse a través de líneas simples. Sus fuentes de inspiración son artículos o informes de noticias. El resultado: obras que condensan una mirada humorística y también amarga de la realidad.
            Este artista postcomunista y postmodernista nació el mismo año en que se construyó el Muro de Berlín y, según sus propias palabras, lo hizo "del lado equivocado". El arte y el humor siempre fueron sus herramientas para escapar de la opresión, una forma de moldear la libertad a partir de una mirada lúcida e irónica del mundo. Sus trabajos buscan denunciar los problemas políticos, económicos y sociales de la actualidad. Su aguda observación de la vida cotidiana y su imaginario producen una aproximación y una forma directa de interpelar a sus espectadores. Dibujos, performances, instalaciones en sitios específicos, intervenciones gráficas y textuales, juegos de palabras conforman un conjunto de obras conceptuales en el que se mixturan temas banales y contenido político, social y cultural.
            Desde 1990, el artista ha contribuido con cientos de observaciones ingeniosas e incisivas publicadas en revistas literarias y políticas, como Contrapunct y 22. Como ilustrador de esta última, y desde su rol de director de arte, Perjovschi dejó su marca al hacer del dibujo más que un medio de información y comentario político un formato original en el que la improvisación de rápida ejecución permite elaborar ideas complejas sin ser moralista. A la hora de realizar una exposición, viaja previamente al lugar para instalarse unos días, hablar con la gente, conocer su cultura e investigar sobre lo que está pasando. Luego, dibuja sobre todo aquello que vio o escuchó. Este creador trabaja a partir de lo que él denomina “grafitis de interior”. El concepto de lo temporal recorre su trabajo: usa las paredes como superficie, pero las dibuja con marcadores permanentes. Las idea es que solo el tiempo y voluntad puedan borrarlo.