Sandra Cinto

Obras
Biografía
Santo André, Brasil, 1968

 

            Sandra Cinto se inscribe en la categoría de artistas cuya misión fundamental es la de explorar el espacio, ya sea en su dimensión íntima o universal. El glosario visual de Cinto funciona como hilo revelador de lo que sucede en su génesis creativa, al mezclar el viaje por la historia del arte con viajes personales. A través de la escultura, el dibujo, la pintura y la instalación, su aspiración principal consiste en transformar el arte en un escenario donde convergen vivencias estéticas y psicológicas, desde las evocaciones de la infancia hasta las experiencias de la madurez.

            A lo largo de su carrera, Cinto ha creado paisajes líricos y narrativas que oscilan entre la fantasía y la realidad. En Construcción (2006), Sandra Cinto transformó la Casa Triángulo en su capilla particular y llenó el espacio con millares de estrellas y cuerpos celestes dibujados y pintados a mano sobre pequeñas hojas de papel. En Bajo el sol y las estrellas (2004), presentada en el Museo de Pampulha, en Belo Horizonte, se apropió una vez más del espacio utópico modernista para construir un espacio atemporal repleto con imágenes de luz (fotografías y dibujos), con fragmentos de cuerpos. Estas representaciones, que a menudo interactúan con la arquitectura circundante, generan la ilusión de universos en constante espiral, desafiando las convenciones del dibujo.

            El uso de metáforas, como el agua y el cielo, transforma los espacios expositivos, ofreciendo a los espectadores acceso a una dimensión poética del cosmos.La revolución, según ella, se encuentra en la conexión humana. Su arte propone un viaje de expansión hacia adentro. La sensación abismal de sus obras se revela en paisajes que despiertan la nostalgia y flotan como ruinas de la memoria, invitando a explorar lo inconmensurable, en una resonancia con la pintura romántica.