Kati Horna

Szilasbalhás, Hungary, 1912 - Mexico City, Mexico, 2000

 

            Kati Horna fue una fotógrafa pionera del surrealismo y una de las primeras mujeres en destacarse en el fotoperiodismo. Comenzó su carrera en París en 1933 y luego se trasladó a Barcelona, donde trabajó como jefa de redacción de la revista Umbral. Durante la guerra civil española, fue comisionada por el gobierno de la República Española para documentar el conflicto, produciendo fotorreportajes que sirvieron como propaganda exterior. A pesar de su talento y contribuciones significativas, la obra de Horna fue poco conocida en vida, ya que se negó a participar en exposiciones o a promocionarse a sí misma. Fue su hija, Ana María Norah Horna, quien descubrió su vasto legado fotográfico después de su muerte, que incluía más de veinte mil negativos.

            Uno de los episodios más destacados de la carrera de Horna fue su participación en la revista S.nob, fundada en 1962 por Salvador Elizondo, Juan García Ponce y Emilio García Riera. La revista, aunque tuvo una vida corta, reunió a artistas y escritores vanguardistas de la época. En particular, Horna destacó por sus contribuciones a la sección “Fetiches” de la revista, donde publicó obras como “Oda a la Necrofilia” y “Paraísos artificiales”. Estas fotohistorias, influenciadas por Freud y realizadas en colaboración con artistas como Leonora Carrington y Luz del Amo, exploran lo onírico, lo sexual y lo macabro, desafiando las convenciones y provocando una inquietante extrañeza en el espectador.

            En su obra, Horna buscaba transmitir la complejidad de las emociones humanas y desafiar las normas sociales y artísticas de su tiempo. A través de sus fotohistorias, exploró temas tabúes, creando imágenes provocativas que invitaban al espectador a reflexionar sobre la naturaleza de lo vivo y lo inanimado, lo tenebroso y lo familiar. Su enfoque colaborativo y narrativo la convirtió en una precursora de las corrientes posmodernas y feministas que surgirían más tarde en el medio, dejando un legado duradero en el mundo del arte.