Sarah Grilo

Obras
Biografía
Buenos Aires, Argentina, 1919 - 2007
 
            Desde sus primeros trabajos expuestos en la Galería Palma en Madrid en 1949, Grilo da muestra de una alianza que trabajará en su poética como una marca característica: el efecto duradero de una formación en el lenguaje abstracto de la pintura moderna y, en simultáneo, una concepción de la pintura abierta, como una ventosa capaz de asimilar, metabolizar y devolver las fuerzas de su entorno material y cultural al lienzo. De este modo, oscilando entre el informalismo, el arte geométrico y concreto y el expresionismo de la nueva figuración, su trabajo congenió el lirismo matérico de sus contemporáneos con el rigor de una disciplina formal cultivada en la gramática moderna. Gesto y líneas, color y plano no son fuerzas excluyentes de sus formas de trabajo sino esfuerzos conjuntos en un mismo plano de composición.
            Esta capacidad de absorción en su pintura cobró particular potencia con su llegada a Nueva York a comienzos de los 60, tras recibir una beca Guggenheim. La agitación política y la experimentación visual de la escena neoyorquina infiltraron su trabajo con intensidades cromáticas inusuales e intervenciones lingüísticas que alteran la idea de pintura pura. Su trabajo cedió lugar a recortes de prensa, de revistas masivas, a las transferencias textuales con la jerga de la época, incluso al grafiti, convirtiendo al lenguaje del color y la forma en un incisivo comentario exterior sobre la sociedad norteamericana y su hegemonía. El cambio de década de los 60 a los 70 la vio mudarse a España, donde residió hasta sus últimos días. Representó, en una tradición fuertemente masculina, una extrema sensibilidad para ampliar su repertorio de soluciones pictóricas para el cada vez más impuro espacio de la pintura. Extendió sus herramientas visuales llevando el trazo hacia la tipografía y la caligrafía, liberando el gesto, haciendo de la tela un palimpsesto de informaciones gráficas comunitarias y rastros subjetivos.
            Su obra fue exhibida en grandes museos internacionales, además de formar parte de la colección de prestigiosas instituciones. Entre ellas, el Metropolitan Museum of Art y el Museum of Modern Art (MoMA) en Nueva York; el Museo Nacional Centro de Arte Reina Sofía en Madrid; en la Colección Nelson Rockefeller (Nueva York); el Museo Nacional de Bellas Artes de Buenos Aires (Argentina) y el Stedelijk Museum (Ámsterdam).